jueves, 1 de noviembre de 2012

De frente y sin máscara

Alejandrina presentó su caso, ella decía que nadie la quería y que tenía miedo estar con alguien.
Para analizar su caso la Doctora primero comenzó a preguntarle por su familia, comenzando por sus padres. Después la Doctora se dio cuenta que todo el problema había surgido por la separación de sus padres y porque había sido abandonada junto con sus hermanos. La doctora le dijo una palabras muy bonitas "Lo lindo fue que tú naciste" esas palabras le llenaron de alegría y emoción porque comenzó a llorar, ya que nadie le había dicho nunca eso. 
La Doctora utilizaba casi las mismas palabras que Alejandrina usaba y apenas le hacía una pregunta o comentario la Doctora sabia que contestarle de inmediato. Trataba de comprender lo que ella estaba pasando y la manera como actuaba. Utilizaba un tono suave pero todo lo que le decía era de forma directa y sincera.
Al principio de la conversación ella no se expresaba mucho, osea era de pocas palabras pero pasaron 10 minutos y ella comenzó a desfogar todo lo que sentía dentro, la confianza que transmitía la Doctora se notaba porque le hacia sentir querida y que le decía que valía mucho a pesar de que Alejandrina no lo crea.
Le dio varios consejos que le levantaron los ánimos.

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