INTRODUCCIÓN
EL CHAMANISMO Y LA PSICOTERAPIA
Los rituales chamánicos utilizados para la curación
y la resolución de problemas están basados en un conjunto de paradigmas y leyes
espirituales. Uno de los caminos para explorar los paradigmas del chamanismo es
observar cómo se relaciona el chamanismo con la psicoterapia clásica. Tanto el
chamanismo como la psicoterapia apuntan a curar la psiquis y el alma, pero sus
puntos de vista sobre cómo facilitar la curación a menudo son contradictorios.
Debido a que difieren en tantos aspectos, chamanismo y psicoterapia pueden iluminarse
uno al otro con una clara luz.
Cuando se
habla de chamanismo en esta comparación, se refiere al chamanismo como
ha sido definido por las más antiguas definiciones antropológicas: las
prácticas espirituales de siberianos, mongoles y tribus nómadas de América del
Norte. Se utiliza la palabra psicoterapia para indicar la psicoterapia clásica:
una terapia aplicada por un psicoterapeuta a gente que está sufriendo
disfunciones psicológicas, por ejemplo, paranoia, neurosis o fobias. La
psicoterapia es utilizada principalmente sólo para problemas e impedimentos
psicológicos. Los campos del chamanismo tradicional y la psicoterapia clásica,
por lo tanto, sólo se superponen parcialmente.
CONSTELACIONES FAMILIARES Y RITUALES CHAMÁNICOS
GRANDA BENITEZ
PSICOLOGO PSICOTERAPEUTA
Hasta el advenimiento de una psicoterapia científica, los curanderos,
sacerdotes, consejeros, fueron de algún modo los pioneros en resolver los
desórdenes emocionales de la humanidad. Paradojalmente en este siglo
vuelve a hablarse de ellos, aunque en algún momento
la psicología los desterró de su quehacer; algo así” como una santa inquisición académica en los
claustros universitarios “.
Enseñar psicoterapia, es una tarea titánica, comprender el
cómo hacer que las personas sanen de estos desórdenes emocionales que
trastocan a la familia, pareja, hijos y la comunidad en su conjunto. Es
una labor pedagógica que empieza con los mismos alumnos. Lo cierto es que en
las prácticas, ellos pueden disfrutar y conocer los efectos de la
psicoterapia.
Empezamos con aplicaciones muy sencillas, ¿quién no tiene tensiones
en su vida cotidiana? ¿Quién no necesita de alguna orientación en
situaciones de vital importancia? , por hablar de casos
menos problemáticos.
En nuestro país tenemos un 67% de la población depresiva, nuestros niños
son violados por sus propios familiares, y ni que hablar de la hostilidad
laboral que es la gran fábrica del estrés, los conflictos,
interpersonales, la angustia, los suicidios, la drogadicción, el
alcoholismo, la ludopatía, familias que desbordan en locura, parejas que se
matan y enloquecen por el amor, la locura. Es aquí en donde la
psicoterapia se inserta. Enseñar a resolver ésta problemática
abandonada por las políticas de salud pública es el reto de la universidad,
capacitar, entrenar, investigar. Lograr que esos documentos fríos que se
llaman curriculares estén conectados con esa realidad.
Según Bert Helliger se ha roto el orden del amor, se ha
quebrantado la ley del dar y tomar, hay una injusticia que descompensa a los
seres y que termina en la locura. Freud fue el primero que señala este
trauma familiar,” el complejo de Edipo” que queda en los rincones del inconsciente,
pero la locura es como el fantasma que aparece en alguna generación, en donde
el paciente viene a pagar una deuda vieja de la familia, o viene a resucitar
algún ser que quebró el viejo orden familiar.
La psicoterapia viene a ser, justo lo que hacían los curanderos,
sanar, exorcizar los demonios emocionales, cicatrizar las heridas. Hoy
nuestros alumnos conocen muchas formas de intervenir de manera rápida en una
población en crisis, han experimentado un trance hipnótico, saben del poder del
lenguaje corporal, que descubre los potenciales de la sanación con
Biodanza, incrementa la autoestima y fortalece valores de nuestra
cultura, cierra las viejas heridas y carencias de amor .
Saben que existen técnicas imaginarias de ayudar a la gente a
resolver su problemática, saben que el alma se mueve en un espacio
terapéutico y que la música llega a esa gran fábrica de emociones que es
el sistema límbico hipotalámico, para hacer los cambios en favor de la salud
psicológica. Nuestros alumnos son privilegiados en recibir esta
información que no llega a otras universidades en donde lo teórico tiene más
valor que lo práctico.
EL
CHAMANISMO Y LA PSICOTERAPIA
La primera diferencia entre chamanismo y psicoterapia
puede verse cuando observamos la construcción del contexto considerado esencial
para la curación. La diferencia puede resumirse esencialmente de la siguiente
manera: el proceso terapéutico se desarrolla a lo largo de una línea de tiempo
mientras que el chamanismo construye una estructura en el espacio. Consideremos
primero el abordaje psicoterapéutico. Cuando uno va a un terapeuta para recibir
asesoramiento, el terapeuta propondrá un periodo de tiempo en el que se
realizará el trabajo. Si uno es fóbico y comienza a ver a un terapeuta en
marzo, el psicoterapeuta podrá bosquejar una estructura de la terapia a través
del tiempo: después de la investigación inicial, podrá rastrear y descubrir las
raíces del miedo en abril o mayo, en junio, uno estará en condiciones de dar
algunos pasos directamente relacionados con la resolución del miedo; en agosto,
podrá ver un progreso sustancial. Finalmente, en noviembre, uno debería estar
en condiciones de funcionar lo suficientemente bien para terminar la terapia. Aunque
el proceso puede ser más largo o más corto de lo planeado y distintos
terapeutas tener diferentes opiniones sobre su duración, el proceso terapéutico
es siempre visto y descrito como un desarrollo gradual a través de un periodo
de tiempo. La curación chamánica tiene lugar en una zona temporal, un tiempo místico
en el que está presente todo lo que alguna vez fue y todo lo que alguna vez
será. Durante un ritual chamánico, todo está dirigido a desconectar a los
participantes de la experiencia del tiempo lineal [...]
El chamán focaliza su atención en la experiencia del
espacio, no del tiempo. Las cuatro direcciones en las cuatro esquinas, el cielo
y los mundos superiores, arriba, la tierra y los mundos inferiores, abajo:
éstos son los puntos de anclaje primarios para la curación, no los meses de
abril, agosto y noviembre. La sanación tiene lugar en un espacio sagrado, cuya
estructura se hace visible a través de altares e imágenes. Todas las personas
que presencian el ritual participan en una escenificación atemporal, en la cual
todo el poder curativo –de hecho todo el que existe- está presente. Durante el
ritual, el chamán invoca a los poderes específicos que pueden contribuir a la
curación, con plegarias y ofrendas de comida, agua y humo, que son colocados
sobre los altares. Un altar es visto como un ancla que une ambos mundos, el
visible y el invisible; sirve como la personificación del poder curativo
invocado. No existe "símbolo" aquí, no hay separación entre objeto y
sujeto. Durante el curso del ritual, un altar dedicado a un espíritu en
particular se convierte en ese espíritu. El chamán, su cliente y los
espectadores están rodeados por los espíritus. A todos los poderes espirituales
se les da su propio lugar en esta reconstrucción ritual del universo espiritual.
Así como rodos los poderes cósmicos tienen su propio lugar, también lo tienen,
de acuerdo con las tradiciones chamánicas, todos los poderes y energías que se
encuentren dentro del cuerpo y la psique del cliente. Cuando un poder o energía
está en el lugar correcto, tiene un efecto benéfico; cuando está desplazado,
crea disturbio. Entrando en el mítico espacio atemporal del ritual chamánico,
un chamán puede recuperar una parte perdida del alma y traerla a casa, puede
sacar energía foránea del cuerpo del cliente y retornarla al lugar de donde
vino. Cuando todas las energías han regresado a los lugares a los que
pertenecen, el resultado es la salud, y las cosas en la vida comenzarán a
organizarse por sí mismas de mejor manera.
Estructurar la curación dentro de un marco de tiempo
o dentro de una estructura espacial es la primera diferencia, y quizás la más
fundamental, entre un proceso terapéutico y una curación chamánica, lo cual
tiene consecuencias de largo alcance. El efecto del paradigma en el que la curación
se da a través de una organización del espacio permite, por ejemplo, que la
curación chamánica pueda suceder en un tiempo notablemente corro. En la
curación chamánica, el tiempo no es un factor relevante. Un individuo puede
estar terriblemente enfermo o completamente confundido cuando el ritual
comienza, y gozar de perfecta salud justo unas horas después. Cuando alguien
necesita curación, el espacio físico en el cual la curación tiene lugar es
transformado a través de la plegaria y la ubicación de los altares.
El espacio se convierte en un mini cosmos en el cual
todos los poderes espirituales necesarios están potencialmente presentes y
podemos dirigirnos a ellos. El chamán elige a qué espíritus se les pedirá que
actúen sobre el cliente. El cliente puede ser invitado a moverse de un altar a
otro para ser presentado a los espíritus, pero a menudo el cliente es llevado a
un lugar específico y permanece allí por el tiempo que dura la ceremonia.
Mientras el cliente permanece quieto, el chamán organiza el ritual manipulando
las fuerzas dentro del espacio. Durante el curso del ritual puede, por ejemplo,
moverse de altar en altar y de estandarte en estandarte pidiendo a las fuerzas
de las cuatro direcciones que entren en la habitación y contribuyan a la sanación.
Cuando el ritual termina, los altares son desmantelados y retorna la
experiencia del tiempo lineal. El cliente emerge del ritual y no es el mismo
que era antes, está tocado por los espíritus y a través de ese contacto, es
transformado. Los poderes de la creación han recreado su vida en el sentido más
literal. A veces puede llevar horas, días o semanas que la curación se integre
completamente en todos los aspectos de la vida del cliente, pero cuando la
ceremonia finaliza, la sanación ya se ha llevado a cabo. Si fué exitosa, el
problema está resuelto, y si no fue exitosa, usualmente la ceremonia no se
repite, porque los espíritus ya han realizado todo lo que estaba a su alcance.
No hay un desarrollo gradual de una fuerza curativa como en el proceso terapéutico;
en chamanismo, la curación es un evento único, repentino y directo.
Una segunda diferencia entre chamanismo y
psicoterapia se aclara al estudiar los roles del chamán y el terapeuta. El
chamán es el experto que conoce su camino a través de las estructuras de
curación del universo y es capaz de activar aquellos poderes que son necesarios
en cierta situación. Habiéndolo hecho, su trabajo está básicamente terminado,
de alguna manera, se retira. La responsabilidad del ritual está en manos del
chamán, pero la responsabilidad de la curación está en manos de los espíritus.
Las actividades del chamán durante el ritual principalmente sirven para
mantener la estructura del espacio mítico intacto, sus canciones son cantadas
para apoyar a los espíritus mientras hacen el trabajo de curación.
El chamán mismo puede también hacer el trabajo
curativo, pero incluso en ese caso sigue las órdenes y sugerencias de los
espíritus. Un psicoterapeuta está mucho más involucrado en el proceso de
curación real, se ha hecho cargo de él. Los terapeutas dan sugerencias,
inventan soluciones y dan a sus clientes tareas para el hogar. El terapeuta
tiene que confrontar al cliente con inconsistencias dela historia de su vida,
evaluar la experiencia de realidad de su cliente y dirigir la atención hacia
asuntos que el cliente está evitando. El psicoterapeuta dirige activamente el
proceso y elige la manera en que se desenvuelve la terapia.Hasta ahora, hemos
visto que el cliente del psicoterapeuta acuerda un número de encuentros a lo
largo de un período de varios meses, y durante ese tiempo es guiado por el
terapeuta. El cliente del chamán entra en un espacio atemporal en el cual el
chamán hace visible la estructura del universo espiritual. Se invoca a los
espíritus y ellos toman el control de la curación real mientras el chamán
maneja la ceremonia.
Un chamán moviliza fuerzas y poderes externos:
espíritus sanadores y fuerzas de la naturaleza. Un terapeuta, en cambio, trata
de activar las cualidades que están latentes dentro de un cliente. Esto significa
otra importante diferencia entre las dos disciplinas. Las escuelas
psicoterapéuticas presumen que hay un potencial en el mismo cliente que puede
ser utilizado para facilitar la curación, de este modo los terapeutas ayudan a
sus clientes a desarrollar nuevas pautas psicológicas y sociales. Durante el
proceso terapéutico, el cliente aprende a verse a sí mismo y a su historia bajo
una luz diferente y comenzará a practicar nuevas formas de comportamiento. Las habilidades que adquiere pueden ya
estar operando en algún aspecto de su vida o pueden ser herramientas recién
desarrolladas por completo. Existe una enorme diferencia entre ver al cliente
como una persona que puede desarrollar su personalidad desde adentro porque
está lleno de potencial o verlo, dentro del contexto de la sanación, como un
campo estático que sólo puede cambiar cuando absorbe e integra energía y poder
del exterior. El terapeuta depende de la fuerza y el potencial del cliente, aun
cuando las cualidades necesarias estén completamente tapadas y prácticamente
invisibles en el momento en que la terapia comienza. El chamán se apoya en la
fuerza del exterior, los espíritus, en lo externo más que en la inteligencia
interna.
Otra importante diferencia entre la curación
chamánica y la psicoterapia es que la primera no está precisamente organizada
para ayudar a un solo cliente. De hecho, cuando se organiza una curación
chamánica, todo el mundo es bienvenido. Cuantas más personas se presenten,
mejor. Familiares, amigos, vecinos, las puertas están abiertas para todos. El
chamán mismo no llega solo tampoco, puede traer a uno o más asistentes, algunos
cantantes y percusionistas, su pareja, hijos y otros parientes. En un encuadre
terapéutico, están sólo el terapeuta y su cliente, nadie más. Un psicoterapeuta
puede reconocer que su cliente se enfermó debido al estrés y a la enfermedad
que se originó en la familia, pero la psicoterapia, aún así, apunta a ayudar
solamente a una persona. En un contexto chamánico, cuando una persona está
enferma, se considera que la totalidad del sistema familiar y comunitario
necesita curaclón, y sería inútil dar la bienvenida solamente al cliente para
la ceremonia curativa. La comunidad toda necesita estar presente para que todos
puedan ser curados, y por lo tanto son bienvenidos a manifestarse y participar.
Durante el ritual de sanación, cada persona eleva una plegaria por el cliente
pero también por su propio dolor y sus problemas, y a menudo ocurre que muchas
personas son tocadas por los espíritus y encuentran curación de una u otra
clase.
Una última diferencia importante entre el ritual de
curación chamánico y la psicoterapia se aprecia al observar la diferencia de
disponibilidad de tratamientos. En el mundo occidental, es bastante simple
actualmente encontrar un terapeuta. Si uno quiere terapia hoy, puede tenerla
mañana. Incluso las personas que no tienen suficiente dinero para pagar a un
terapeuta pueden a menudo conseguir alguna clase de psicoterapia, ya que el
seguro de salud cubre varias terapias. El ritual chamánico de curación es mucho
más difícil de organizar, no sólo para la gente en el mundo occidental sino
también para aquellos que viven en una cultura chamánica tradicional. Primero,
uno tiene que encontrar un sanador o chamán de quien se sepa que tiene los conocimientos
para abordar la enfermedad o problema específico. Después, tiene que acercarse
a él; usualmente, esto significa llevarle ciertos regalos tradicionales
mientras le pide una ceremonia de sanación. El chamán puede no contestar
inmediatamente, puede tomarse algunos días para "investigar" el
pedido, a la espera de un sueño o una reacción de los espíritus. Podrá, o no,
estar de acuerdo con un ritual de curación, y sólo cuando la respuesta sea
"sí", se establecerá una fecha. Uno necesita hacer preparativos,
preparar los diversos altares de acuerdo a las detalladas instrucciones del
sanador o chamán. Probablemente, llevará mucho esfuerzo, tiempo e incluso
dinero reunir el material y hacer los altares. Hay que preparar el espacio en
el cual se celebrará el ritual. Se debe preparar un banquete para ofrecer a
todos los participantes después del ritual, lo cual significa comprar mucha
comida y disponer de gente que la cocine. Uno tiene que comprar o hacer regalos
para todos los que lo ayudan. El ritual de curación chamánico es posible
solamente cuando muchas personas contribuyen con su tiempo, energía y dinero.
En realidad, todos preparativos tienen una razón práctica. Recién cuando uno
está realmente preparado para pasar por todos los preparativos para una curación
chamánica, y eso significa que cuando el ritual finalmente tenga lugar, el
chamán encontrará un cliente que está realmente comprometido.
La paradoja es que, aunque un ritual chamánico de
curación cuesta bastante dinero si se considera lo anteriormente mencionado, el
chamán en sí mismo no es remunerado. Se supone que el patrocinador del ritual,
el paciente o un miembro de su familia, debe hacerle un regalo al chamán, pero
eso es todo. En la sociedad chamánica tradicional, los regalos para el chamán
son prácticos y valiosos. Este principio de no remuneración no debe, sin
embargo, confundirse con dar apenas algo de poco valor o sin valor alguno. En
una comunidad pequeña y cerrada, las personas conocen exactamente las
necesidades de los demás, y de ese modo, si las redes de pesca del chamán están
viejas y rotas, recibirá una nueva red de un cliente agradecido; si la manta
del chamán está gastada y hecha pedazos, recibirá una manta nueva.
La psicoterapia funciona de manera opuesta. Uno no
necesita a nadie que lo ayude a prepararse, puede acceder a la terapia
fácilmente, y el dinero que cuesta va directamente al terapeuta. Existen muchas
otras diferencias entre las disciplinas chamánicas tradicionales y
psicoterapéuticas clásicas, por ejemplo, la manera en que son entrenados los
terapeutas y los chamanes. Un terapeuta ha elegido voluntariamente convertirse
en terapeuta pero un chamán tradicional no tiene opción, es tomado por los
espíritus para la tarea. En las culturas chamánicas, las personas sólo
comienzan el entrenamiento para llegar a ser chamán porque los espíritus así lo
desean. Si has sido elegido, las tradiciones dicen que el costo de negarse a
ser un chamán es muy alto: enfermedad grave, locura o incluso suicidio.
QUÉ
SON LAS CONSTELACIONES?
Las Constelaciones Familiares ponen en evidencia
la profunda conexión de cada persona con su sistema familiar, donde existen
profundos vínculos de amor y lealtad. Si un miembro del sistema deja cosas
sin ‘resolver', será alguno de la próxima generación quien, de modo
totalmente inconsciente, intente resolverlo.
Con este trabajo se manifiestan las fuerzas conflictivas que actúan en los
sistemas. La toma de conciencia de las dinámicas e implicaciones que generan
conflictos y problemas en el sistema, lleva a comprender los ‘Órdenes del
Amor' y a generar soluciones que aportan paz y bienestar a todos los miembros
de la familia.
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La persona obtiene una imagen nueva y sanadora de su
sistema familiar, en el que cada uno ocupa el lugar que le corresponde ya sea
en su familia, en su entorno, en las relaciones y en el mundo, libre de
proyecciones y de historias sin resolver. También se pueden trabajar con
Constelaciones otros problemas vitales de relaciones profesionales,
empresariales, de un individuo, ya que todo proceso y toda organización forma
parte de un sistema, sea éste social o de creencias
LA FORMACIÓN EN CONSTELACIONES FAMILIARES Y
SISTÉMICAS
El programa de Formación en
Constelaciones Familiares Sistémicas va dirigido a:
- Profesionales de la ayuda ya formados en otras
disciplinas como psicólogos, psicoterapeutas, psiquiatras, trabajadores
sociales, educadores, maestros, médicos, mediadores...
- Toda persona que quiera profundizar en su
autoconocimiento a través de las Constelaciones y a la vez formarse como
profesional.
Para ejercer como profesional
reconocido, es necesario estar formado o formarse en una formación terapéutica
o en alguna rama de la psicología, y se necesita una experiencia terapéutica
previa.
A partir de la experiencia de
las anteriores formaciones, y con el objetivo de que la formación sea cada día
más completa, se ofrecen tres niveles de formación que suman un total de más
de 400 horas y 100 horas de supervisión.
Objetivos de la formación:
- Capacitar a profesionales para que puedan incorporar en su
trabajo las Constelaciones Familiares y Sistémicas
- Aprender y profundizar en el conocimiento de los sistemas y
subsistemas que sostienen el orden familiar de los individuos. Solucionar
conflictos con uno mismo, la familia, la pareja y el trabajo
- Familiarizarse con los órdenes del amor y la fuerza de la
reconciliación
- Profundizar en el lenguaje corporal, el lenguaje hipnótico, la
mirada y los espacios
- Conectar con nuestro cuerpo para expresar y liberar recursos
que aún no conocemos
- Desarrollar metáforas, ritos del lenguaje y frases curativas
- Crear e
integrar imágenes sanadoras
- Sanar los arquetipos personales y transpersonales
- Generar en uno mismo una actitud terapéutica de conciencia,
aceptación, comprensión y quietud interior. El aquí y el ahora
- Descubrir el silencio interior y conectar con el Ser Interno
y el Espíritu
DEL
CHAMANISMO A LA PSICOTERAPIA… EL USO DE PLANTAS ALUCINÓGENAS CON
FINES TERAPEÚTICOS
Al
hablar de chamanismo, inmediatamente situamos en nuestra mente la imagen de un
hombre o mujer, sosteniendo un manojo de hierbas que agita fuertemente
frente alguna persona, emitiendo oraciones o en su defecto cantando.
Seguidamente, imaginamos al chamán o curandero consumiendo algún alucinógeno
(hongo, hierba o raíz) o haciendo que la otra persona lo consuma, todo
esto con el fin de entablar una comunicación con los espíritus o dioses, para
que lo ayuden a diagnosticar el mal o males que aquejan a su paciente, o ir más
allá y predecir el futuro…
Esta comparación del uso de alucinógenos, se discute
ampliamente en un artículo publicado por el Dr. Ralph Metzner,
profesor de Psicología del Instituto de Estudios Integrales de San Francisco en
California, Estados Unidos, en un artículo publicado en el
Journal of Psychoactive Drugs (1998), titulado:
En este artículo el Dr. Metzner narra desde el
inicio como fue su caminar en el mundo de la psicoterapia y como llegó a
expandir sus conocimientos sobre el uso de los alucinógenos, tratando con
diferentes terapias. Desde sus estudios en Harvard sobre el uso potencial del LSD (dietilamida
de ácido lisérgico, aislada del hongo Claviceps purpurea, que crece sobre el
centeno) y la psilocibina (componente
activo de los hongos Psilocybe sp.) en aplicaciones
terapeúticas (Leary, Metzner & Alpert 1964) en trabajo conjunto con
investigadores como Timothy Leary y Richard Alpert, hasta su incursión en el
uso de terapias y métodos que excluyen el uso de medicamentos o drogas
psicoactivas, y que incluyen a la meditación, yoga y la alquimia (Metzner
1971).
LSD (dietil
amida del ácido lisérgico) compuesto alucinógeno extraído del cornezuelo del
centeno ( Claviceps purpurea ), hongo que crece sobre esta planta.
Uno de los motivos que movió al autor para escribir
este artículo y que fue de su mayor atención, es la singularidad del uso de
plantas que alteran la conciencia, tanto en la psicoterapia, como en el
chamanismo. Ambas utilizan algunas plantas muy similares, para alcanzar grados
de conciencia o elevación del pensamiento, que permiten experimentar
situaciones extrasensoriales. A primera vista podría pensarse que los fines con
los que se utilizan las plantas alucinógenas en ambas, son distintos, sin
embargo, las dos buscan el mismo fin, la cura o sanación del cuerpo, la mente y
el espíritu.
Metzner comparó las cosmovisiones resultantes del
uso de plantas psicoactivas tanto en el chamanismo como en la psicoterapia,
basado en cuatro diferentes sistemas de la transformación de la conciencia:
1)
La psicoterapia dentro del modelo occidental
estándar; 2) Los rituales chamanicos de adivinación y curación; 3) El
sincretismo de las ceremonias religiosas y populares; 4) Rituales híbridos:
terapeúticos-chamanicos, que son una mezcla de rituales chamanicos indígenas
con un enfoque psicoterapeútico occidental.De los sistemas mencionados por
Metzner en el artículo, el más interesante a resaltar es el que se refiere a
los rituales chamanicos de adivinación y curación. El autor describe
detalladamente un ritual chamánico, así como algunos de los rituales de los
grupos indígenas o étnicos más difundidos en el mundo, como los huicholes, los
indios mazatecos de Oaxaca, los nativos del Amazonas, la tribu Bwiti de Gabón
en África. Cada uno de ellos utiliza una planta diferente para alcanzar lo que
los psicólogos llaman, “estados de conciencia”, o como los curanderos lo
nombran “entrar al viaje”. Plantas como el peyote (Lophophora williamsii)
de los huicholes, los hongos psilocibe (Psilocybe mexicana, Psilocybesp.)
de los mazatecos, la ayahuasca (bebida preparada con varias especies de plantas
como Banisteriopsis sp., Mascagnia glandurifera, Tetrapteris
methystica, entre otras) usada por las tribus amazónicas y la iboga
(Tabernanthe iboga) de los Bwiti, son algunas de las plantas
alucinógenas que se analizan en la lectura y que se sabe alteran la percepción
psicológica del mundo real, creando una serie de visiones o alucinaciones,
sobre las cuales tanto el chamán o curandero como el psicólogo hacen
interpretaciones para ayudar a sanar el cuerpo y la mente.
Bajo la premisa de que tanto la psicoterapia como la
prácticas de adivinación y curación chamánicas son métodos no convencionales de
estudiar el comportamiento humano en sus estados más puros de conciencia y de
inhibición del yo verdadero, la lectura nos transporta a los pueblos indígenas
donde se desarrollan dichos rituales, tratando de explicar el porqué de dichas
prácticas y nos acerca más a entender la cosmovisión de estos pueblos en el uso
de plantas alucinógenas.
CONCLUSIONES:
Hablar del
chamanismo es algo muy complejo, para mí es un camino a la realización
espiritual dentro de una cosmovisión, o sea tiene conexión con la naturaleza; los chamanes conocen de las plantas alucinógenas
y la cura surge de manera temporal. O sea,
yo creo que parte de un pensamiento mágico y no en el racional y sus rituales
son acciones que cuentan con un sistema religioso, sobre todo su propósito es
curar.
Lo que me
llamó la atención es su Sabiduría ancestral; pensamiento mágico que se
encuentra en el hemisferio derecho y sus
danzas ancestrales; que provocan estados alterados en la conciencia e ingresan
a la realidad invisible, mueven la energía y la vitalidad y permiten entrar en
un estado de trance; además de sus Rituales en Psicoterapia, ellos (chamanes)
lo adecuan a cada realidad, conocen la realidad idiosincrática de su País para
adecuarlo a cada paciente; sus actos son simbólicos y no se restringen
posterior a la vida cotidiana.
Hay distintas
maneras de definir estos temas, una referencia del Chamanismo en la ciencia es ‘’SUGESTIONAR’’
(principios del chamanismo). Imaginación: Yo soy el producto de un sistema, en
donde hay transmisión generacional. También dicen que las enfermedades son
maldiciones, y que todos pertenecemos a un alma y que estamos interconectados.
Ahora, ¿Qué
son las constelaciones Familiares?, es un método terapéutico Sistémico
Fenomenológico que busca restablecer el orden del amor en los Sistemas Humanos,
mediante la reconciliación. Su campo morfológico es interesante porque orientada
a:
-
Ordenar
el Sistema familiar a la que pertenecemos
-
Liberar
fuerza vital retenida, o sea cuando mi vida se detiene y no va más allá y me
estanco (no hay progreso).
-
Equilibrar,
dar y tomar vínculos de salida o solución
-
Facilitar
el fluir del amor
Es
importante reconocer en la familia cuando son excluidos por ejemplo, la fuerza
tiene que ver con las órdenes de los padres y abuelos que nos van a llevar a
vivir de determinada manera.
Y ¿Quién es un miembro de un sistema familiar,
cuyo destino es considerado fatal, en general, ignorados, olvidados y
excluidos?.
Todos
los que han sufrido de muerte prematura, un niño muerto al nacer, una madre que
muere en pleno parto, un esposo de un primer matrimonio y un novio comprometido
y perderlo en la guerra.
Me
gustó mucho cuando el chamán mencionó algunas frases sanadoras, ya que, tienen
una fuerza impresionante en el rostro, las frases curativas integran a los no
integrados, reconocen a los no reconocidos, completan lo incompleto y sobre
todo completan el orden.
Los enfoques existenciales se caracterizan por ser “todos centrados en la
vivencia” y porque “la forma de acercarse a esta vivencia es a través de la
experiencia fenomenológica y no mediante la interpretación. Luego, el trance de
los chamanes también sigue ciertas acciones que se van sucediendo en forma
correlativa, por supuesto con otras cualidades y otro desarrollo de los procesos.
De esta manera, menciona los trabajos
que se realizan durante un trance chamánico y que coinciden perfectamente con
las motivaciones fundamentales del análisis existencial
Luego de esta comparación, con un proceso psicoterapéutico es, “porque el modo
en que uno ingresa al mundo espiritual es vivencial” y por ende, el terapeuta
no tiene expectativa alguna acerca de qué es lo que debe suceder, sino más bien
“se valida directamente la experiencia espiritual de cada uno”.
BIBLIOGRAFÍA
v Leary, T., Metzner, R. & Alpert, R.
1964. The Psychedelic Experience. A Manual Based on the Tibetan Book of
the Dead.
v New Hyde Park. Editado por University Press
Books. New York.
v http://www.lanacion.com.ar/1303518-los-rituales-ancestrales-cada-vez-mas-convocantes
v Daan
van Kampenhout: La
sanación viene desde afuera, chamanismo y constelaciones familiares,
Ed. Alma Lepik, Argentina, 2004.